La depilación con láser es un procedimiento médico, por lo que tienes que realizar el mismo esfuerzo en escoger un profesional a como harías si tuvieses que buscar un cirujano.
Pregunta por las titulaciones y siéntete seguro/a y cómodo/a con el conocimiento y la experiencia de quien te practicará el tratamiento.
Comprueba que los láser que utilizan están autorizados y son de alta potencia, ya que los de baja potencia y la luz pulsada intensa no son tan efectivos y provocan una mayor incidencia de complicaciones.
Confirma que te hacen un estudio sobre los factores que determinen si el procedimiento será efectivo para ti, a través de:
- Preguntas sobre tu pasado médico, así como los medicamentos que estás tomando.
- Un disparo de prueba con el láser más adecuado a tu pelo y piel, para comprobar la reacción de tu piel al láser.
- La información de los riesgos y los beneficios que puedes tener.
- Una explicación de lo que el láser hará o no por ti y que resultados obtendrás.
Una vez que estés de acuerdo a someterte al tratamiento, debes firmar un documento de consentimiento en que declares estar debidamente informado/a y autorizas expresamente la depilación mediante el láser.